Esta es muy buena. Con astucia para niños o retrasados mentales adultos, pretenden que la chusma lea con alegría las próximas multas o extorsiones que les tiene preparadas el Estado Penitenciario Fascista Español Homosexual Sanitario. Como si fuera el regalo de su puta y fascista navidad.
La prensa da por hecho que sus castrados lectores leerán semejante mierda, incluso con ilusión infantil.
Hace unos años atrás, los lectores hubieran dicho: “Estos ladrones ya nos están jodiendo otra vez. ¡La puta que los parió!”.
Ahora no. Se juntarán unos cuantos cabestros con su móviles en la máquina de café de la empresa y discutirán si no será necesario elevar el precio de las multas. Desearán en el fondo de su pequeño cerebro que les metan una para colgarla en sus redes sociales y constituirse en ejemplo de civismo al declarar que es lo que pasa cuando no obedeces.
Y obsérvese que se da por hecho que toda la chusma estará ebria en navidad. Es una forma de decir: “Emborrachaos, cabestros. O no seréis ciudadanos ejemplares del mes en McDonals. Y ni se os ocurra fumar si no es marihuana”.
Es un auténtico adoctrinamiento del nazismo ganadero de cerdos, borregos y ovejas de dos patas; que además conducen borrachas.
Y con bozal en sus propios coches de mierda.
Precioso…
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