Aquí no hay drama, la madre de la mujercita de dieciséis años se puso celosa de su hija por lo bien que se lo estaba pasando.
Me hace mucha gracia que lo del video vaya contra su intimidad, cuando se estaba comiendo la polla de su chulo en mitad de la pista de baile bien arropada por decenas y decenas de borrachos y borrachas. No jodas qué risa.
Es que son tiempos de pobreza, igual esperaban subir la grabación a una web de videos porno para ayudar en casa a pagar el recibo de la calefacción, si tuvieran.
Será menor de edad, pero a menos que se le declare un retraso mental, una mujer con dieciséis años sabe qué es follar y de una forma natural llevarse un buen rabo a la boca. Y con dieciséis años, nadie te puede prohibir follar seas hembra o macho.
Porque entonces deberían prohibir la entrada en España a esos multimillonarios jeques árabes que dejan millones de euros acompañados de su harén de mujeres en las que hay niñas de doce y catorce años, y todo tan legal de mierda.
Esta es una noticia del día de los inocentes, una broma para la inteligencia y un escándalo para los cabestros que lucen bozal y con más orgullo, su cartilla veterinaria de vacunación con las diecisiete pautas completas.
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