martes, 20 de diciembre de 2011

Gato muerto



Solo en un mundo asqueroso los animales mueren llenos de basura y excrementos.
Yo no quiero morir aquí, yo no quiero que un coche me aplaste y se me peguen desperdicios y mierda en la piel; pero será así, se me dijo en un juego banal que moriría de muerte violenta.
Estoy dispuesto a asumirlo, es romántico pensar que me arrastraré con el espinazo roto o la cabeza reventada hasta un montoncito de basura y hierbas venenosas.
Esta es la mierda que espera después de todo: morir con una etiqueta sucia y mugrosa pegada en el culo tras ser arrollado por un piojoso coche.
Lo siento mucho, gato blanco.
Lo siento de verdad.

Mierda…

Buen sexo.
Iconoclasta