domingo, 28 de marzo de 2010

Yo gorila


No soy caballeroso, ni educado, ni cordial.
No puedo ser afable.
No cuando una mujer me enloquece. La belleza saca lo más primitivo de mí.
Supongo que soy una especie de gorila apenas evolucionado.
Sinceramente y entre nosotros, ahora que estoy sobrio: me dan ganas de golpearme el pecho.
¿Es esto una perversión o tener el cerebro podrido?
Yo ser Tarzán, tú ser Jane.
¡Uh-uh-uh!
¿De verdad yo he escrito eso de ahí arriba? Mentira, alguien me ha "hackeado". Yo no digo esas cosas.

Buen sexo.
Iconoclasta

domingo, 21 de marzo de 2010

La bella y el delfín



Su sueño es nadar con delfines.
Y el delfín sonríe feliz esperándola. Estas cosas se notan.
A veces el universo tiene un arranque de ternura y hace realidad un hermoso sueño.
Vale la pena cerrar los ojos y verlos nadar.
¡Shhhh...! Callemos, es magia pura. Se lo merecen tanto...
Es precioso.
Gracias Universo, hoy no puedo odiarte.

Buen sexo.
Iconoclasta

lunes, 15 de marzo de 2010

Personajes entrañable ble ble ble bles


Lástima que yo sea un ser tan sumamente inflexible, fascista e inculto.
Lo reconozco.
Porque siendo así de mal parido no puedo disfrutar de la diversidad cultural con que nos regalan los diferentes lugares de este jodido planeta.
¡Cómo envidio a los cultos y liberales que disfrutan y se excitan con este tipo de vida jocosa y desenfadada! Ociosa.
Debería sentir lástima de mí mismo por mi paleolítica mentalidad.
Mea culpa, digo escupiendo como si me hubieran metido en la boca un bolita de chicle con pelo-polla de julandrón includes.
Es un asco ser tan macho, te pasas la vida escupiendo.
Vaaale, tampoco me lo paso tan mal, disfruto hidratando mi órgano sexual en los momentos de paz espiritual.
Pero que asco ¿no?
Buen sexo.
Iconoclasta

lunes, 8 de marzo de 2010

Nieve


Estaba paseando frente a un instituto en el momento en que los hiper hormonados jóvenes estudiantes comían sus desayunos.
Y en ese instante han caído unos copos de nieve.
Pues bien, como era de preveer por mi poderoso y eficaz cerebro, se han puesto a gritar de tal forma llevados por la euforia de la nieve, que pareciera que les hubiera tocado una noche gratis de sexo convulso y sodomita en la casa de putas o putos más degenerada del país.

Es algo que he sentido muy de cerca, ya que me han irritado directamente los tímpanos con sus berridos de venados en celo.
Ellas estaban monísimas con sus pezones duros y erectos. Y estoy seguro y así me pla
ce pensar, que no los tenían duros por el frío.
De no haber sido por sus gritos idiotas, hubiera tenido una potente y dolorosa erección.
A mí me da igual que nieve, voy a follar igualmente...

¡Qué tierno!

Buen sexo.
Iconoclasta