Junto a la policía, los sanitarios representaron y personificaron a la dictadura del coronavirus en España durante los encarcelamientos decretados.
Insistían con puñetazos en la mesa, que se debía anular toda libertad, incluso la de respirar; se humilló y segregó a mucha gente. Es lógico el rencor.
La libertad es enfermedad, el lema oficial de España del 2020 al 2023, no tenía por qué gustar a todo el mundo que habitaba la feliz, infantil y aplaudidora dictadura.
Dicen que quien la hace la paga, y eso vale para todos. A cada cerdo le llega su sanmartín, que dice el saber popular.
La lógica, en lugar de las ideologías y religiones, lo clarifica y sintetiza todo.
La foto no tiene desperdicio: posando al aire libre con bozal (mascarilla en jerga nazi). Realmente, son la facción dura e inflexible de la dictadura española.
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