(Historia Nat Geo, n° 136)
Así decía un anuncio de alquiler en Pompeya sobre el 62 d.C.
Apenas ha cambiado nada, solo que al esclavo se le llama ahora vendedor de pisos o asesor inmobiliario. Es de risa.
Por no mencionar lo de aspirantes a caballero, ni que fuera una licenciatura. Nacían hijos de puta y luego estudiaban para tener más elegancia.
Bueno, también ahora ocurre lo mismo y no todos respiran el aire cargado de azufres y tóxicos del Vesubio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario