viernes, 16 de octubre de 2020

Un triste final


Quisiera que mi muerte fuera triste, tanto como el final de Cien años de soledad.

No es por vanidad, es que la vida ha sido tristeza durante muchos años y quisiera ser consecuente.

Es incongruente una vida triste y una muerte muda, sin gritos; es humillante.

Sé que mi final será una mediocridad más en el planeta, la imaginación no me hace ingenuo. Me ato muy corto a la tierra, para que mi cadáver no se rompa demasiado al caer.


No hay comentarios: