miércoles, 24 de junio de 2015

Sois mi envidia


¡Ah... cornudos y cornudas!
Ya me gustaría a mí tener una vida intensa como la vuestra y no ser tan asquerosamente libre.
Porque es muy triste vivir una existencia tan plana como la mía.
Me río; pero es pura amargura. Lo juro.
Porque a pesar de vuestras astas, creéis en la pureza de vuestro amor.
Me río por pura envidia, es solo un acto traicionero de mi histérica tristeza.
Tenéis una vida plena y sobre todo rica, porque el marfil se cotiza a buen precio.
Me sigo riendo de pura rabia, soy ponzoñosamente envidioso.
Que me parto...

No hay comentarios: