jueves, 12 de febrero de 2015

Dolor y cinco segundos, apenas...

Si tiene que doler que duela. Cuando se conoce la vida se sabe a ciencia cierta que nunca es bastante y que habrá más dolor. Siempre hay más de lo malo que de lo bueno. ¿Cuánto dura una eyaculación? ¿Cinco segundos? Y luego a limpiar.
Mierda...
Si tiene que doler que duela y sigue caminado, coño. Queda mucho,  queda demasiado para luego nada. Cabrón, so cabrón. Siento una ira hacia mí mismo...
Soy un genocida.
La vida es una fanfarria sin ritmo ni proporción.
Cinco segundos de gloria de mierda...
Para reírse...

miércoles, 11 de febrero de 2015

Un viejo cacharro



Si se tiene tiempo que perder, incluso en la mediocridad de un mediodía de un sol descorazonador, puedes dar un paseo por el tiempo y usurpar una nostalgia que no te pertenece. Unas veces tan viejo y otras tan joven. Así no hay quien folle.

martes, 10 de febrero de 2015

Curiosidad


Sus bigotes son tan grandes como su curiosidad, su inocencia. Clarís mira el mundo, yo la miro a ella y yo permanezco en la penumbra. Ya no soy curioso. Soy exigente, solo quiero admirar.

Rain Man y las putas

Estaba viendo Rain Man por puro aburrimiento y al pensar en autistas y otros deficientes mentales, he evocado otras experiencias pasadas.
Y uno acaba dudando sobre si son muy tontos o muy listos.
Esta vena existencialista en mí a veces me hace descender a la oscuridad.
Porque cuando pasas con una prostituta unos meses y te cansas de ella y sus enfermedades, te das cuenta de que algo falla en los canales de comunicación. No hay forma de sacársela de encima por mucho asco que le hagas ver que sientes o el desprecio que le demuestras. Tal vez su padrone la instruía; pero no había brillo intelectual en su mirada.
Era inasequible a la humillación, imagino que como tenía el cerebro en el coño y el coño sucio no se enteraba. O tal vez era una habilidad de su profesión.
Ser probador de condones te hace experimentar lo más sórdido e indescifrable de la mente de las putas. Es un trabajo casi mentalista, además de un buen lubricante, necesitas un curso de perfeccionamiento personal por fascículos coleccionables.
Tal vez sí se enteraba y era hábil siendo puta... Por otro lado, cuando se reía parecía un burro...
Es que viendo Rain Man, se crean dudas. O tal vez los deficientes mentales tienen una escala de valores de un solo escalón: el picor genital que les lleva al dale que te pego convulso y sin elegancia.
Rain Man es solo una peli... Tengo que centrarme en el National Geographic, a ver si se aclaran estas dudas.
Voy a probar más condones que ha pasado la hora del desayuno ya. Y de paso fumo en mi departamento, que en el comedor no me dejan.
Asquerosos...

La risa y la muerte

Recuerdo mi risa, una risa desencajada por un chiste durante el velatorio de mi padre. Fuimos algunos los que reíamos, seguramente los que más lo queríamos.
¿No es maravilloso nuestro sistema de defensa ante la agresión de la muerte? No se ha dado en ninguna otra circunstancia.
El cerebro aparta el dolor muy astuto él (por lo que le conviene):
"Vamos, colega. Toca reír, que te me vas a partir en dos con toda esa tragedia".
Y ríes por la cosa menos graciosa pensando: "Coño... ¿De qué me río con tanta muerte por aquí?
Y otro cuenta otro chiste...
No dejé de pensar en él cuando reía. No dejé de amarlo.
Me propuse reír más, sobre todo de mí mismo.
-En una panadería han hecho un pan de trescientos kilos.
-No tiene gracia.
-Pero tiene miga.
Como yo...

domingo, 8 de febrero de 2015

Desequilibrio

Hay un extraño desequilibrio, no acaba el planeta de afianzarse bajo mis pies.
Se remueve inquieto, incómodo.
Lo siento en ese temblor que reverbera en mis rodillas.
Y caminar se convierte en algo incierto, la dirección varía constantemente.
No es mi culpa que la tierra tenga miedo a mis pasos firmes y el apocalipsis que sueño ser.
Me pide que sea un poco más cuidadoso con sus rocas.
Me pregunto si se refiere a que las abrace.
Si insiste, le confesaré que mi pensamiento es atroz; pero mi sexualidad no incluye la litofilia. Le amenazaré con mis brocas y agujerearlo para enseñarle el verdadero dolor. Algo aproximado a una rodilla enferma sometida a un temblor de tierra escala tres millones richter.
Hay días que no se puede pasear tranquilo por la cobardía ajena, aunque sea la de una piedra gigantesca.

sábado, 7 de febrero de 2015

Duerme

Duerme.
Una mierda, que hay sueños que no me gustan, hay pensamientos que no cesan.
Hay cosas que hacer y la impaciencia barre el descanso y lo convierte en angustia. Incluso en esperanzas que me tengo prohibidas.
No quiero llorar al dormir, no me gusta despertar triste. No necesito esas puñaladas traicioneras, las lágrimas se convierten en legañas que duelen al arrancarlas.
Mejor caer desmayado, es cuestión de esperar. Lo malo es ser fuerte. Vendo salud, tengo a chorros, algo de debilidad va bien. Voy a donar salud, y de paso acorto un poco la vida, es demasiada larga y cada vez duermo menos.
El sueño eterno es más sereno, más tranquilo. No hay cosas que esperan y desesperan, está todo acabado.
Necesitas dormir.
Dios también, pero no deja de pensar en mí, por lo visto tampoco duerme.
Es esa impaciencia por vivir a todas horas, tienes que hacer un esfuerzo.
Estoy cansado, todo requiere esfuerzo. Hay gente que duerme sin él.
Estoy maldito.
Estás loco.
Ambas cosas no tienen remedio.
Solo es cuestión de voluntad.
Creo que la voluntad se ha gastado, o la empleo toda en estar despierto, se ha roto algún conducto importante, el conducto soñador.
Morirás, te estás consumiendo en las noches.
Al final acabamos siempre pensando en la muerte yo y yo mismo. Somos unos cabrones locos.
No te rías.
Estoy llorando.
Todos lloran y duermen. Deberías ser más cauto.
Pronto será de día, no vale la pena intentarlo.
Deberíamos querernos más, cuidarnos.
Somos unos fracasados.
No es buen lugar éste, no es fracaso, es decepción.
Como quieras; pero no me gusta que me corrijan.
Vamos a tomar un café y fumar, eso nos une.
Tal vez sí, tienes razón.
Buenos días, yo.
Buenos días, yo mismo.
No te rías.
Sigo llorando, pero es por vicio, tengo los ojos secos.
Entonces es lógico que llores.
¿Ya ha salido el café?
Hace ruido la cafetera, ahora bajamos a ver.
Con mucho azúcar.
Con todo el azúcar.
Se nota el día, nos disociamos cada vez menos.
Moriremos con los ojos legañosos.
Lo sé.
Ya nos entendemos.

La imagen de Dios

La imagen de Dios debería ser la de una vaca con unas gigantescas ubres de las que quieren mamar millones de becerros, salpicados sus pelajes de excrementos. Está bien, a Alá que lo representen con una cabra: idénticas tetas, idéntico número de reses, igual de sucias.
Solo que en vez de mugir, balan. ¿Sí?
Pues pasemos a la canción del cinco que en el culo te la hinco (era necesaria esta ordinariez para que algunos sonrían, los asuntos de dioses suelen crear llagas. Todos sonríen cuando aparece la palabra culo o pedo).
Esto de distinguir a las reses, son pequeños detalles que en un cerebro que funcione medianamente bien, sería innecesario; pero no me fío de la funcionalidad sináptica de los adocenados, crédulos, fanáticos y talibanes.

Tiempos mejores

"Cualquier tiempo pasado fue mejor", debería usarse como sarcasmo o ironía para poner de manifiesto la imbecilidad de asaz gente.
Porque los hay que se lo creen de verdad. La envidia y la decepción de ver lo que son y han hecho tras el paso de los años, les lleva consolarse con semejante vulgaridad.
El egoísmo y la vanidad se hacen más fuertes y virulentos con el paso del tiempo. Y la envidia hacia los más jóvenes llega a convertirse en una ira enfermiza y oculta.
Nada nuevo bajo el sol, porque con esto de los tiempos pasa como con el sexo: se eternizan prejuicios, ignorancias, envidias y vanidades generación tras generación.
Cualquier tiempo pasado fue peor: había más ignorancia, miedo, pobreza y la peña se reproducía demasiado y con poca calidad.
Como ejemplo vosotros y vuestro pasado mejor, miraos bien en el espejo, idiotas.

viernes, 6 de febrero de 2015

Hostilidad


En ocasiones me siento hostil y habrá alguna razón que no puedo concretar. Tal vez una música, un olor, un frío, un no estar.... Pero no es un recuerdo, porque los recuerdos puedo enfocarlos nítidamente, enumerarlos, clasificarlos y arrancarles la cabeza.
Algo hiede a podrido en Dinamarca y solo puedo concluir que el mundo y yo no acabamos de entendernos bien.
Cosa que  no consigue aplacar esa hostilidad milenaria que sale de lo más primitivo de mí.
La locura alimenta más locura. Esto acabará algún día, lo sé. Es la impaciencia...

Cumple años Daisy Marie


Actriz porno estadounidense, sin ninguna trascendencia más que poner un poco de carne llamativa al artículo. Podría ser buena chica, incluso inteligente; pero solo se conoce lo que se ve. Y bueno, hay que ser consecuentes con lo que se hace, no pasa nada. Ella es feliz y nosotros también. A falta de cerebro un buen coño siempre ha sido la mejor opción para prosperar en la vida. No cambiará nunca la humanidad. Ni el sexo a pesar de tantos años será algo natural de lo que hablar. Solo será pasatiempo pornográfico y continuará haciendo reír a los subnormales.

Cumpliría años Eva Braun, una puta infinitamente más mala que ninguna otra. Hay que ser puerca para ser amante del ridículo tirano alemán, sus dos intentos de suicidio fueron una mierda cobarde, una obra de teatro para llenar el ego de ese puerco que jamás debería haber nacido: el endogámico y tarado Hitler.

Cumple años Axl Rose, el cumpleaños que vale la pena celebrar con agrado esta semana. Cantante y compositor del grupo de hard rock y heavy metal Guns N' Roses. Ha estado en la lista de los 100 mejores cantantes de rock de todos los tiempos. Está bien, tampoco hay arqueología del rock, no estamos hablando de etruscos. November Rain es ya una canción universal e imperecedera.

Entre una vulgar actriz porno y la puta de la Eva Braun, destaca el bueno de Axl. Está bien, es bueno tocar la realidad y saber que los más marranos y tirados seres han pasado a la historia consiguiendo la gloria y la admiración de los idiotas.

Buen sexo, si podéis.
Iconoclasta

jueves, 5 de febrero de 2015

El árbol humano, una novela de Iconoclasta


"La soledad es su naturaleza, o una parte de ella. Porque su otra naturaleza se marchita de pena entre savia y fibras que no acaba de asimilar como suyas.
Las noches son el descanso de los árboles, la fotosíntesis es agotadora.
El vegetal se retira y da paso al hombre.
Al hombre más solo del mundo." (Iconoclasta)

Para leer en:
http://issuu.com/alfilo15/docs/el___rbol_humano_libro
y
http://binibook.com/details.php?id=1656

Tarjetitas de la sabiduría de Iconoclasta "touch"

Las Tarjetitas de la sabiduría de Iconoclasta ya no son virtuales. Ya se pueden tocar, doblar, usar como papel higiénico de emergencia, etc...


Tarjetitas de la sabiduría de Iconoclasta
Tarjetitas de la sabiduría de Iconoclasta

Tarjetitas de la sabiduría de Iconoclasta


miércoles, 4 de febrero de 2015

Dudas y amor

En el amor no existen los problemas, solo las dudas. Y una duda es lo que lo mata.
Eliminas el amor, se despeja la duda y la percepción del problema desaparece.
De cualquier forma, ese "amor" estaba condenado. Y si eres ya un poco adulto, una duda tan solo es el consuelo torpe de una certeza.
Tal vez la peña necesita dudas para entretenerse ante la falta del hábito de lectura u otras inquietudes intelectuales y se castiga vacilando mucho tiempo. Es razonable, le da interés a sus vidas, las hace más importantes (a ellos mismos) y crea temas de conversación y con ello, amistades.
Soy demasiado simple, el suspense y el misterio me gusta en las películas y en los libros, justamente lo que me distrae junto con mi libreta y mi pluma realmente cara. También soy materialista, cosa que va bien para eliminar dudas.
Soy más de aquello de: muerto el perro se acabó la rabia.
Y como dice el anuncio de mastercard: para todo lo demás, están las putas.
El mundo se divide entre lo higiénico  y lo sucio, sin duda alguna.
Soy fumador y me toca lo sucio. No voy a dejar de fumar por eso.

Morir

Es una buena hora para morir...
Hay silencio, nadie ve que te apagas, nadie grita, nadie se asusta...
No hay nervios, solo esa desidia de la fatiga que convierte a la muerte en un susurro que te dice: "Ya está bien, ya es hora. Estamos un poco cansados, amigo Iconoclasta. Vámonos de aquí".
Como si me quisiera, como si me cuidara.
La muerte tiene buenos detalles cuando te la encuentras en la noche, en la intimidad y el silencio de ti mismo. La ternura se agradece cuando lo amado descansa y te quedas un poco indefenso ante el mundo.
Ella duerme en algún lugar cuando yo hago mutis por el foro, sin alardes, con discreción.
Y con la exquisita ternura que he aprendido en el momento de morir, le digo al aire: "Te queda mucho, mi amor. Nos encontraremos pronto, sé feliz hasta el agotamiento. Estaré bien. Estarás bien... Adiós".
Es tan sencillo...
Era tan sencillo amar hasta la muerte. No había un drama, solo cariño y delicadeza.
Y una fatiga serena, casi como la sonrisa de un augusto dibujada en los labios cerrados.