jueves, 3 de abril de 2014

Y los limones tan caros

Cuando algo que creías conocer adquiere nuevos matices y se hace extraño o ajeno, el rechazo va de la mano de la sorpresa.
Y es bueno, es supervivencia.
Y hala, a buscar otro disco CD, que los viejos apestan.
La música es una moda pasajera y desagradable en algunos casos. Salvo la de la infancia y juventud.
Y los limones tan caros...
El aburrimiento que no cesa.

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