Disfrutamos de una obscena soledad (hay videos en yutup que lo demuestran). Gozamos de un pensamiento tan superfluo como un chorro de semen en las sábanas. Así de superficial e intrascendente. Es liberador e irresponsable. Incluso irrespetuoso con las humanas emociones.
A veces mi picha piensa y las otras veces no piensa nadie y me limito a fumar.
Y ni a él ni a mí nos importa lo contaminado del semen. Ni las ratas muertas en las cajetillas de cigarrillos.
Y como los huevos son tontos, no se enteran que el yogur está agrio.
A algunos les parecerá sórdido; pero nosotros nos lo pasamos chachi piruli en Dalequetepego Sésamo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario