Ejemplo de los años luz de distancia a los que se encuentra el cine español de la imaginación.
¿Cómo puede el cine español atraer a nadie con sus películas pretenciosas, pedantes y pseudo-intelectuales?
¿Qué tiene de ameno e imaginativo la vida de dos barrenderas o dos ingenieros aeronáuticos que cuentan sus fantasías, sus temores y frustraciones?
El cine no es un libro.
El cine español, salvo alguna excepción, sólo provoca tedio.
Y a quien no le gusta este cine aburrido, que hace balar a las ovejas sobre todo los lunes al sol, es porque es un lerdo inculto, claro.
Así es fácil hacer películas, y barato. Y encima se montan el tinglado de los goyas.
Las subvenciones sólo sirven para potenciar la mediocridad.
Metafísica pura es el cine español, no te jode...
Buen sexo.
Iconoclasta