La cándida felicidad

La felicidad eterna es un supositorio plástico rellenito de semillitas de mostazita.
(The Planet of the Mariconcillo's)
Tic-tac, tic-tac...

Buen sexo.
Iconoclasta

El Santo Coño

¿Existe el Santo Coño?
De ser así:
¿Entre qué piernas se encuentra?
¿Donde se encuentra el templo del Santo Coño?
¿Cuánto cuesta la cuota de inscripción?
¿Tendré derecho a meterla?
Quiero un pin.
Ora et menea, amén.

Buen sexo.
Iconoclasta

Vasos medio llenos, medio vacíos

Optimismo vs. pesimismo. Qué más da si el vaso está medio lleno o vacío a medias, al final lo que cuenta es que hay un vaso con algo dentro.
Posiblemente mierda.
Lo bueno sabe a poco. Lo malo siempre es excesivo. Tal vez sea mejor escupir dentro, por si acaso. O tal vez estrellarlo contra el suelo.
La ambigüedad es una mierda y aquello que es compartido o tomado a medias, es un fracaso estrepitoso.
O todo o nada y que se metan el vaso medio lleno o medio vacío en el culo.
Divino.

Buen sexo.
Iconoclasta

Iconoclasta el genocida

Tengo mil bebés en mis testículos.
Practico el aborto de forma habitual, con cada masturbación, con cada gemido que doy en la oscuridad, en la soledad obscena.
No tengo corazón, me entretengo con extinguir lo que un día pudiera nacer.
Y no me duele nunca.
Soy Iconoclasta el genocida.

Buen sexo.

Al filo de la palabra nº 9

http://alfilodelapalabra.wordpress.com/2011/09/05/al-filo-de-la-palabra-n%C2%BA-9/

Epitafio 17

No quiero conocer vuestros secretos. Ni los que me atañen. Y cuando muráis que no se desvelen.
No soy curioso y he conseguido la soledad perfecta entre vuestras complicidades pueriles, entre vuestras congregaciones tontas. Soy la soledad hecha hombre.
En mi tumba tallaré: Un tipo corriente.
Moriré con una sonrisa de secreto alivio.

Menudos secretos...

Buen sexo.

Iconoclasta

Un consejo de la Iglesia

Buen sexo.
Iconoclasta

La Yawar Fiesta

Coge un enorme cóndor, lo atas al lomo de un toro y los cuatro gilipollas de la aldea se pondrán a correr como locas delante de los dos animales.
(Una lágrima surca mi sonrosado rostro ante la emoción).
Más o menos es una representación simbólica de la lucha de las culturas andina y española. Y ahora está más en auge que nunca, puesto que los emigrantes que vuelven a Perú con ínfulas de nuevos ricos, se las dan de amos de explotación de negros algodoneros y les regalan a los pueblerinos algo de feria para pasar el rato y así que les besen el culo por su gran generosidad.
Yo digo que me gustaría más que al nuevo rico en cuestión le amarraran los cojones al lomo del toro y batiera las orejas como si fueran alas (antes que se quite el ridículo sombrero típico).
Y ya pueden echar a correr los tontos del pueblo delante de esa representación chapucera de un toro alado.
Y que salte y salte el toro, hasta que el rico peruano se quede estéril y así no se perpetúe la estulticia.
Preciosa la riqueza folclórica del planeta. Me la pone dura.

Buen sexo.
Iconoclasta

Epitafio 16

Mi nicho es mi castillo, que los cocodrilos del foso velen por mi paz eterna y verdadera.

Prohibido dar de comer a los animales, es necesario que estén hambrientos.

Buen sexo.

Iconoclasta

Muertes bailongas

Las muertes en los antros y discotecas por asfixia y cremación son esas cosas que siempre me han provocado un temor ancestral (aunque tampoco es algo que me provoque pesadillas, quería ser literario). Siempre he sentido una pena infinita por los muertos que se quedan pegados unos a otros por los vapores cianúricos de los artificiales materiales que usan para el equipamiento de estos locales.
Claro que ellos no tienen la culpa de morir, no del todo.
¿Pero qué coño hacen cientos de adultos con síndrome agudo de adolescente de sexo inquieto y no consolado, apiñados unos contra otros? Es normal cogerse el vientre cuando se retuerce con un ruido espantoso. Más concretamente cuando dan ganas de cagar con esa fuerza centrífuga irritante que tensa los dedos de los pies y obliga a apretar las nalgas con fuerza. Eso ocurre cuando me imagino muerto con ellos. Bueno, no es que sea elitista, pero yo no me junto con cualquiera.
¡Ah esos borregos adocenados de fiebre dance!

Buen sexo.
Iconoclasta

Al filo de la palabra nº 8

http://alfilodelapalabra.wordpress.com/2011/08/16/al-filo-de-la-palabra-n%C2%BA-8/

Un coño de oro

Una puta con dinero es una puta con el coño de oro. De la misma forma, soy una puta con una mente potente e imaginativa. Pero lo mío es un mal negocio, nadie me la mama. Sólo me sodomizan. No me pagan y el semen chorrea por mi culo y por mi boca. Imparable, asqueroso, repugnante. Es una pesadilla cremosa.

Bueno... Algún defecto tenía que tener; si tuviera coño...

Por 30 euros os la chupo...

Este mundo es un sucio burdel, yo me meo en su puerta.

Buen sexo.

Iconoclasta

La edad mental en las redes sociales

Hay un problema con la edad mental en relación con la edad biológica en los usuarios de las redes sociales: tienen más años que la tos y su lenguaje y modos son propios de la edad de los siete u ocho años, cinco a lo sumo.
También se les podría tomar por ángeles, ya que se apuntan a toda clase de festejos virtuales en pro de las ballenas, de los delfines, de los gatos y de las ratas de cualquier religión que diga que las piedras tienen alma.
En fin, que si me han de dejar un mensaje en el muro tipo: "Eres tope chachi" ó "Saluditosybesoabrazoconmilcariñosytequierounmontón"; prefiero directamente el insulto de alguien muy mujer o muy macho aunque me tenga que cagar en su madre o padre.
No es por nada, pero las redes sociales existen para hablar de sexo y follar en un futuro aunque no sea inmediato. Se está desvirtuando la función de internet.
Me gusta y dedo metido en el culo. Precioso.

Buen sexo.
Iconoclasta

Al filo de la palabra No. 7

Revista de Aragggón Iconoclasta

Narco-naco

Tómese al palurdo más analfabeto de todo México, póngasele una pistola en la cintura y otra debajo del sobaco, y en el bolsillo unas hojitas pasadas de marihuana: en menos de cinco minutos ya le están dedicando narco-corridos, a los diez minutos ya tiene dinero para comprarse un diputado. A la media hora es íntimo amigo del presidente del sexenio actual y en veinticuatro horas ya ha decapitado a treinta personas mientras la policía fuma unos canutos mirando a la luna lunera.
En poco menos de dos meses, será candidato a la presidencia del país.
Y lo que es peor y de todo punto insoportable: estos idiotas tienen el gusto en el culo. Sus mansiones son igual que burdeles de lujo. Y es que lo son.
Sus mujeres tampoco son demasiado selectas, como ellos pero con coño.
¡Órale, narco-naco!

Buen sexo.
Iconoclasta