Se adelanta el vía crucis del procés independentista republicano. Ahora hay un primer jueves santo previo al jueves santo eclesiástico que, conlleva nuevos rituales para gloria de muchos beatos y mártires que no han muerto; pero dan mucha pena por estar en el trullo.
Fugarse, huir, no es escapar de la ley. La RAE deberá modificar esta acepción por: internacionalizar el procés independentista catalán.
Decenas de miles de reses humanas amenazando a una docena, no es acoso, no es violencia: es pacifismo. La RAE deberá "semantizar" bien la definición de violencia y acoso.
Ambición de protagonismo y poder, deberá ahora figurar en la RAE como: amor por todos los catalanes. Entre ellos, más concretamente.
Fascismo, populismo y xenofobia, deberían englobarse como Amor a la Terra. O sea, sin connotaciones negativas.
Otra nueva acepción que revisar por la RAE: No hay delincuentes, no hay golpistas de estado, no hay ladrones en el gobierno catalán de la república de Cataluña. Todos son mártires y muy buena y amorosa gente. O sea, delincuencia es martirologio. No lo tiene fácil la RAE.
Los independentistas no roban fondos públicos, no es malversación: es cuidar del único catalán que reside en la república (ya que todos los catalanes debieran ser solo uno y una sola voz). Además del léxico, se requiere una reforma del código penal.
Pues todos felices. Los independentistas se ven motivados a lanzar sus soflamas de victimismo y lloriqueo fácil. Y además han conseguido ampliar la festividad de la semana santa en Cataluña.
Y la RAE tendrá más trabajo gratificante, del que le gusta: contentar a dos millones de sectarios catalanes, de la misma forma que contenta con sus nuevas correcciones e inserciones en el diccionario a millones de incultos interneteros.