miércoles, 14 de febrero de 2018

El amor no es tóxico


Nadie muere de un exceso de sentimiento. Nadie cae enfermo por usar el “alma”.
Quien muere “por amor”, es porque no ha leído la etiqueta del bonito y decorativo frasco de veneno.
Al fin y al cabo, el deseo, el amor, el odio y la lucha son adrenalinas que mantienen el corazón en funcionamiento.
Solo el autoengaño y la autocomplacencia (no me refiero a la masturbación) son venenosos.

No hay comentarios: