
Quentin Tarantino es la prueba viviente y actual de que sólo es necesario ser oportunista y lisonjero hasta el asco (obsérvese el eufemismo) con la peña que tiene la pasta, para que te regalen dinero y poder poner en los títulos de crédito de un video casero, que eres director de cine.
Si en en los Establos Unidos de Norteamérica del norte tienen a Quentin Tarantino, nosotros no podíamos ser menos y tenemos a Santiago Segura.
Es que tengo una mala suerte a veces con las películas...
El séptimo arte... Y un huevo.
Buen sexo.
Iconoclasta
2 comentarios:
Hombre, no ofenda usted a Segura comparándolo con el mendrugo de Tarentino. El Segura se ríe hasta de su sombra, y hace muy bien mientras haya público para sus comedias, pero Tarentino parece que es tal cual,que se toma en serio a Tarentino.
Bueno, es una forma de consuelo.
Aunque a Segura no hay dios quien lo ofenda, tiene unas buenas tragaderas.
Buen sexo, Amiguete.
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